Tu mirada me enseña
mis ridículas cosas
ella habla conmigo
y me ayuda en la sombra
Ella abrevia leyendas
si exagero en mis épicas
ella establece limites
cuando rompo fronteras
Tiendo siempre a escucharla
pero no aprendo nunca y tropiezo sin cese...
ella va y me levanta, perdonándome siempre.