miércoles, 24 de junio de 2015

Las naranjas de Gaza

Anoche tuve sed.
Bajé al jardín a buscar naranjas
Una luciérnaga brillaba
escondida en la ranura de una piedra
Fascinada como siempre
por la Luz fui a buscarla
Anduvo por mi mano
paseándose.
¡Son feas de cerca las luciérnagas!

Cayeron otras luces
de un cielo, cercano, ensangrentado
Estas gritaban estridentes.
Volví a dormir
olvidando las naranjas.

Fatalista